CB Manzanares y CB Ciudad Real pasan a la final

Buena defensa de los locales, que este domingo juegan "su" final a las 17 h.

El buen trabajo defensivo del CB Manzanares en el segundo tiempo dio el pase a la final a los locales, que no remontaron hasta que consiguieron frenar a Manu Pastor. El CB Ilarcuris, que había empezado con fuerza, se fue diluyendo en la maraña defensiva local.

El CB Ilarcuris salió con la idea de borrar la imagen que había dado el pasado fin de semana en Manzanares y a fe que lo logró. Sólo en el primer cuarto ya había anotado la mitad de puntos que en todo el partido de hace siete días. Los toledanos echaron mano de Manu Pastor, su jugador franquicia, para superar la defensa del CB Manzanares Opticalia. Lo consiguieron. Pillaron por sorpresa a los locales, que no pudieron hacer la férrea presión a la que tiene acostumbrada a su afición. Pastor dirigió a los suyos en ataque y lo notaron, pese a la intimidación de Verdeguer. A Manzanares le tocó ir a remolque en los primeros minutos, que acabaron con 15-19 para los visitantes.

Y si en el primer cuarto el protagonismo lo había cogido Manu Pastor, en el segundo fue para el jugador franquicia del CBManzanares. Luis Verdeguer se echó al equipo a las espaldas en la faceta ofensiva. Lideró los ataques de los locales y anotó con facilidad. Eso sí, en los primeros minutos sólo les sirvió para mantenerse en el partido, ya que el CB Ilarcuris encadenó hasta tres acciones de dos más uno que le permitieron mantener los cinco puntos de ventaja. (22-27). Parecía que los locales tenían argumentos para comenzar a remontar, pero fue el contrario. El CB Ilarcuris no sólo mantuvo la distancia, sino que logró incrementarla poco a poco y, sobre todo, acabar con los intentos de locales. Así, al descanso el marcador era de 28-36.

La reacción del CB Manzanares llegó con el inicio del segundo tiempo. Dos triples de Luis Gabriel Nieto Sandoval y varias buenas defensas de los locales les pusieron a sólo un punto 40-41 y sembraron las dudas entre el CB Ilarcuris. Cuando más agobiados estaban los toledanos volvió a aparecer Manu Pastor para aumentar las distancias. (41-47). Los manzanareños volvieron a despertar y esta vez Carlos Sánchez fue el encargado de recortar distancias. Un triple suyo volvía a poner a los locales a solo un punto (50-51). Eso sí, la remontada llegó desde la defensa. Un robo de balón de Rubén Bruno puso por primera por delante a los locales justo antes de acabar el tercer parcial (54-52).

Los locales crecieron desde la defensa y en el inicio del último cuarto completaron un parcial de 15-3 que les puso cinco arriba (60-55). Muchos de los puntos vinieron de robos en la presión y de varias acciones en las que consiguieron frenar a Pastor y salir al contragolpe. El partido estaba de cara para el CB Manzanares y lo supo aprovechar. Michel y Ngouda dieron nueve de ventaja a los locales a falta de sólo tres minutos para el final. El partido estaba resuelto, aunque el CB Ilarcuris aún lanzó una última ofensiva que resultó infructuosa. Al final 73-67 para los anfitriones.

El CB Ciudad Real no dio opción al Villarrobledo en la otra semifinal (89-72)

Velocidad, ritmo y acierto. El CB Ciudad Real pasó por encima del Agrícola de Villarrobledo que sólo aguantó a los ciudadrealeños en el primer cuarto. Después todo fue coser y cantar para los de Jesús Muñiz, que tuvieron en la conexión Iniesta - López al eje de su juego.

A ritmo de bólido y sin tiempo de pestañear. El CB Ciudad Real impuso desde el primer minuto una velocidad de Liga EBA y el Agrícola de Villarrobledo lo acusó. Hervás e Iniesta lanzaron a un equipo que juega casi sin mirar y pronto se hiceron con una ventaja de seis puntos. A los roblenses les costó meterse, pero se adecuaron a las condiciones que exigían los ciudadrealeños y aprovecharon los centímetros de Albert para ir recortando distancias e impedir que se les marcharan. Sin embargo al final del cuarto el marcador era de 23-16 para los ciudadrealeños.

En el segundo cuarto el CB Ciudad Real comenzó a romper el duelo. Tres acciones consecutivas les dieron la primera ventaja sólida 30-18, gracias a la conexión Iniesta-López, que funcionó a la perfección. Entre ambos, y con la ayuda de Hervás en la dirección, hicieron imposibles los intentos de recortar del Agrícola de Villarrobledo. Y en un nuevo acelerón de los ciudadrealeños se marcharon de 20 puntos. Hervás culminó un contragolpe con un mate que dejaba tocado moralmente a los roblenses. Ya no se recuperaron. El cuarto siguió inclinado hacia el lado del equipos de Jesús Muñiz, que se marchó al descanso con un margen 25 puntos después de un parcial de 29-11 en el cuarto.

El partido no cambió a la vuelta de vestuarios. El CB Ciudad Real siguió aumentando distancias y rozó los 30 puntos. Fue el momento en que Muñiz decidió dar descanso a los importantes de cara a la final y el equipo bajó enteros. Lo aprovecharon los roblenses para recortar distancias. A falta de dos minutos para acabarse el cuarto el marcador era de 62-42, aún un mundo, pese a los intentos del Agrícola de Villarrobledo, que al final del cuarto iba 22 abajo.

Y en el último parcial el CB Ciudad Real dejó pasar el tiempo para meterse en la final por la vía rápida.