Es uno de los gallitos del grupo y pugna por estar entre los cuatro primeros
Juan Díaz-Benito
El campo municipal de fútbol "José Camacho" va a albergar este domingo una nueva final para el Manzanares C.F. A los locales solo les vale ganar para seguir sumando y corroborar el trabajo de la última semana, con la victoria a domicilio en Marchamalo. La empresa no será fácil. Visita el campo manzanareño uno de los grandes del grupo XVIII, el C.D. Azuqueca, a tres puntos de play-off y que viene de mojarle la oreja al Villarrobledo el pasado domingo.
La afición del equipo manzanareño, en el partido de esta jornada, puede determinar hacia dónde se incline la balanza. El C.D. Azuqueca es el tapado de la categoría junto con el Quintanar del Rey. Los azudenses tienen calidad en ataque, futbolistas de medio campo con una entidad sobresaliente y ante todo una moral a prueba de bombas. Que nadie olvide que el año pasado ganaban en Manzanares por 1-4.
¿Qué va a tener enfrente el Azuqueca este domingo? Pregunta con respuesta contundente: a un grupo de futbolistas serios, honrados y con unas ganas enormes de vencer, un grupo de gente que va a ratificar la victoria del pasado fin de semana en Marchamalo. Si a las ganas de los jugadores y cuerpo técnico le añadimos una afición que empuje desde el primer minuto es más que probable que la victoria se quede en Manzanares.
El Azuqueca visita al Manzanares a solo tres puntos de los puestos de promoción de ascenso. Los alcarreños vienen cargados de moral tras ganar en casa al Villarrobledo, segundo en el grupo XVIII de Tercera División. El Azuqueca ha hecho de su campo un fortín ya que ha ganado los seis partidos que ha jugado como local marcando como mínimo dos goles. Su asignatura pendiente son los partidos a domicilio. Fuera de casa ha sumado tres puntos gracias a sus empates ante Torrijos, Villarrubia y Albacete B aunque en sus dos últimos desplazamientos cayó derrotado, ante el Conquense y el Talavera de la Reina.
Los hombres a tener en cuenta en el conjunto de Miguel López son Roberto Izquierdo, que marcó dos goles en el encuentro ante el Villarrobledo, y Esaú, jugador que siempre crea muchos problemas a la zaga contraria. El míster del Azuqueca hacía debutar la semana pasada al juvenil Pablo, que dejó muy buenas sensaciones en San Miguel, y que podría volver a aparecer en función de cómo se desarrolle el choque ante el Manzanares.
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